lunes, 17 de febrero de 2014

Charles Bukowski
El padecimiento continuo
traducción de Silvia Barbero
72 poemas






Tiene una pésima opinión de las mujeres, los objetos y los hombres, pero no es ni misógino, ni espiritual, ni misántropo. Es caótico, pero jerárquico.Y entre vientos de cambio y divinas comedias, inmortaliza por igual a pobres diablos anónimos y a los héroes de nuestra historia reciente. Es Bukowski cien por cien puro. Violento, obsceno, generoso, irónico, desagradable, arduo, honesto. Se presenta a sí mismo como se sentía: hundido. Sabe que no es justo culpar al mundo de todas nuestras desgracias, básicamente porque ningún mundo tiene la capacidad de salvarnos o condenarnos. Desde la postración del más débil, un poeta destruye a golpes de realidad el imperio de los fuertes. Sus versos son las ruinas de América.